Aquella noche no se duchó una vez, sino dos. Se sentía sucia después de cada actuación; a su piel se habían adherido los ojos, el aliento y las manos de los espectadores.El relato completo está incluido en el volumen Aurora
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Aquella noche no se duchó una vez, sino dos. Se sentía sucia después de cada actuación; a su piel se habían adherido los ojos, el aliento y las manos de los espectadores.El relato completo está incluido en el volumen Aurora
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