Novelas Plurales

Novelas Plurales: La alambrada, Olga y la ciudad, Actores sin papel, Noticias del fin del mundo.

«Mientras algunos se obstinan en destruir, unos pocos nos empeñamos en seguir creando»

8 de abril de 2016

Un apunte sobre la novela

Un apunte sobre la novela
Contexto: España, abril de 2016

Podemos estar de acuerdo en que, en comparación con otras épocas, la que vivimos muestra un claro agotamiento de la novela y demás géneros narrativos literarios, tanto en términos de lectores como en términos de calidad.
Los factores de este agotamiento, evidente para todos los que amamos la literatura (evidente no sólo en las letras españolas), quizá puedan agruparse en tres campos.
El primero es la hegemonía de la narrativa audiovisual. Las películas, cualquiera que sea su soporte, cine, televisión o vídeo, han demostrado una gran eficacia y han conquistado el imaginario de la mayoría de los individuos.
El segundo tiene que ver con la sustitución de una cultura humanista por otra de corte corporativo. Digo “corporativo”, no “empresarial”. Se han antepuesto la publicidad al debate, los prestigios inflados al talento, las ventas a la calidad de la obra. Los intereses de todo tipo han ahogado la cultura literaria y han domesticado la palabra, nuestra herramienta intelectual.
En el tercer campo estarían los factores de tipo endógeno. La condescendencia con experimentos formales atrevidos pero fallidos. El desequilibrio que muchos autores han aceptado entre el tiempo que dedican a la promoción y el que dedican a la lectura, el estudio y la creación. La falta de autoexigencia.
Existen alternativas. Me gusta pensar que sí existen alternativas.
Aún hay un lector que quiere leer un buen libro.